Rehabilitación de una almázara para su uso como vivienda

Segorbe 2007

Encontramos un edificio realizado con muros de piedra y ladrillo macizo y forjados de madera y revoltón. Era un piso muy oscuro, debido a la gran profundidad del espacio y a la poca entrada de luz. El patio interior existente se transforma en una linterna que sirve de separación de espacios y distribuidor. Se saca valor a la materialidad existente, rehabilitando los elementos estructurales de forjado y manteniendo las texturas de los muros. Para incrementar la luminosidad espacial, se pintan todos los muros en blanco, manteniendo su textura que dota a la vivienda de mucha personalidad. Las puertas que dan acceso a las habitaciones y cuartos de baño se intengran en un panelado, con la intención de crear una superficie continua, en la que no se lean a simple vista la ubicación de las mismas.

Proyecto
Esther Hervás y José Carcases